domingo, 31 de agosto de 2014

TC: VOLVER A EMPEZAR

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La bandera a cuadros marcó el fin de la competencia en Rafaela, pero también le dio un cierre a la etapa regular del campeonato 2014 del Turismo Carretera 

Los doce protagonistas  de esta mini serie de cinco capítulos llegan con diferentes realidades más allá de saber cada uno de ellos que lo hecho hasta acá es importante pero lo más importante es lo que sucederá de acá en adelante 

Matías Rossi: El piloto que cuenta con todas las chances. Durante la etapa regular fue siempre el piloto a vencer más allá de algún altibajo. Sumó una buena cantidad de puntos para enfrentar la parte más importante en la lucha del campeonato y cuenta con un auto muy equilibrado y un equipo que está centrado en pelear el título. Una contra es el peso de la historia. Nunca un piloto que ganó la etapa regular pudo coronarse.

Christian Ledesma: Otro Chevrolet competitivo demostrado en las últimas fechas. El marplatense ganó en Posadas y Rafaela recientemente demostrando un alto nivel competitivo. El equipo cuenta con la experiencia de Alberto Canapino y además con una variante que puede jugar a su favor. Su compañero de equipo hoy no está dentro de los doce, eso le quita presión al JET Racing.

Facundo Ardusso: El piloto de Dodge apareció al inicio del campeonato como el gran sumador y con una contundencia impresionante. Con el correr de las competencias se fue desvaneciendo ese poderío y más allá de mantenerse competitivo y haber ganado una carrera hoy por hoy no se muestra como la firme amenaza de algunas fechas atrás. A su favor cuenta con la experiencia de todo el equipo y de Hugo Cuervo para revertir la situación.

Juan Manuel Silva: El gran sumador. El chaqueño cuenta con un título que pocos pueden lucir. Es, sin dudas, el piloto más frio para correr y sumar. Silva sabe que no cuenta con el auto para pelearle a los punteros pero siempre se las ingenia para estar en el pelotón de punta y llevarse buenas unidades. Pero esta etapa es para ser contundentes y allí deberá trabajar el equipo.

Jonatan Castellano: Siempre estuvo. El y su Dodge son los únicos sobrevivientes de la historia. El alto de Lobería nunca falto a la definición y eso le da algo de experiencia, el contrapunto, es un auto que fue muy irregular a lo largo de la primera parte del certamen. Junto a su padre y toda su estructura deberá alcanzar un vehículo más competitivo si quiere ser candidato.

Guillermo Ortelli: El séxtuple carga con el peso de la leyenda. Si bien es un experimentado en manejar la experiencia, Ortelli sabe muy bien que cuenta con un equipo capaz de superarse y eso será fundamental para iniciar la Copa de Oro con aspiraciones al título. Hoy no está dentro de los Chevrolet más competitivo.

Omar Martínez: Otro experimentado sumador. El Guri es un caso similar al chaqueño Silva. Sin tener un auto regular siempre suma y eso lo llevó a estar dentro del selecto grupo de los doce. Ahora la mira debe cambiar de objetivo y apuntar a un Ford más contundente, regular y veloz como lo demostró en Rafaela.

Nicolas Trosset: La gran sorpresa. El arrecifeño se metió entre los doce a fuerza de conseguir muy buenos resultados al inicio del certamen. Luego perdió algo de competitividad pero pudo sostenerse adelante. La contra que tiene es la falta de experiencia para pelearle a los históricos.

Juan Martin Trucco: El silencioso. El joven piloto de Dodge vuelve a estar dentro de los doce con su propia estructura. La duda es saber si podrá soportar la presión que genera la definición del Turismo Carretera peleando con las grandes estructuras. Entiéndase grandes estructuras por triunfos, logros y poder económico.

Leonel Pernía: En un partido de fútbol para el "Tanito" es el tiempo de descuento. No le queda margen de nada. Cuenta con un equipo fuerte, poderoso, con experiencia pero en las últimas carreras penaron con problemas de confiabilidad y eso les hizo perder  protagonismo. Lo positivo es que tiene a su favor a la familia Kissling que en más de una ocasión demostró  contar con las herramientas para salir adelante en las adversidades.

Juan Marcos Angelini: Una montaña rusa. El hombre de Dodge no fue de lo más regular y eso lo sufrió en la parte final de la primera parte del certamen. En Rafaela inicio el fin de semana como el hombre a batir y terminó con problemas en su Dodge que le privó de ver la bandera a cuadros.

Mariano Werner: Entró por la ventana.  Alguna vez el que entró por la ventana terminó quedándose con el título y eso en el folklore del TC vale, pesa y mucho. Pero el entrerriano debe cambiar.  Si el objetivo es el campeonato Werner deberá barajar y dar de nuevo en el seno de su equipo.

De los doce candidatos hay cinco que ganaron. Ellos son Ortelli, Rossi, Ledesma, Werner y Ardusso. 

De estos ganadores hay dos que repitieron: Rossi y Ledesma. El de Del Viso con tres triunfos (La Pampa, Concepción del Urugay y Paraná) y el marplatense con dos (Posadas y Rafaela).

A partir de ahora habrá siete pilotos con la obligación de ganar en solo cinco fechas para cumplir con la exigencia reglamentaria.  Ellos son Angelini, Silva, Martinez, Pernía, Castellanos, Trucco y Trosset. A medida que pasen las carreras esas chances se reducirán aun más.

Para el ingreso a la Copa de Oro los pilotos participantes cargaran 20 kilos de lastre largando todos con el mismo número. En el caso puntual de Rossi deberá retirar 15 kilos de su Chevrolet ya hasta acá había cargado 35 kilos producto de sus buenos rendimientos.

Finalizada la fecha número quince, el reglamento contempla el ingreso de tres pilotos más a la lucha por el campeonato en la cita final del certamen. Esos tres privilegiados no podrán contar con el puntaje extra por carrera ganada. 

A partir de ahora se baraja de nuevo y en San Luis se repartirán las cartas que cada piloto sabrá cómo jugarlas. Lo cierto es que, hoy por hoy, el que saca una buena ventaja es Matías Rossi que logró un colchón de puntos importantes con sus triunfos que le permite tener una mirada diferente de la Copa de Oro.