jueves, 21 de agosto de 2014

EL DÍA 2 FUE CASI PERFECTO

..:: Largaron ::..



Se acercaba la segunda noche y el Torino N° 3 seguía puntero inamovible con dos vueltas de ventaja sobre el Ford Capri N° 7 que, al superar en el camino al Torino N° 1, era segundo con la misma cantidad de vueltas que el líder, pero con dos giros de penalidad en su haber.

En tercer lugar estaba el rebautizado como "La Banana", el Torino N° 1 dificultosamente reparado luego del choque de los entrenamientos previos, que le llevaba también dos vueltas al BMW de Duchting-Scheider-Degen y al Mazda de De Fierlant-Enever-Bertinchamps, sin penalizaciones al cambiar neumáticos fuera de la zona de boxes prohibida.

El mejor Lancia seguía siendo el de Kallstrom-Barbasio-Fall, recuerden estos nombres, también sin problema alguno en el tren delantero ni en los amortiguadores.

El Ford Capri siguió a ritmo fuerte arriesgando en la noche anterior y de esa forma logró descontarle vueltas al Torino puntero. Pero semejante esfuerzo tuvo su cuota y debió detenerse a cambiar neumáticos, pastillas de frenos, y hasta el limpiaparabrisas, todo en zona reservada para los pilotos.

En la mañana, con 45 autos todavía en carrera, el Torino 1, en manos de Luis Di Palma, hizo una detención y el propio "Loco" fue el encargado del reemplazo de las dos gomas delanteras en 3 minutos. El viento terminaba por secar la pista y las nubes se fueron por un rato nada más.

Mitad de carrera.
El objetivo "de mínima" ya había sido alcanzado. La Misión Argentina lograba completar media carrera con dos de los tres autos girando sin sobresaltos, salvo alguna preocupación de Di Palma porque el embrague comenzaba a fallar y si se rompía sería el final; el auto puntero, en cambio, conducido alternativamente por "Larry", Copello, y Franco, estaba perfecto, y la quimera de ganar no era imposible.