lunes, 24 de octubre de 2011

VARIAS: AL FLACO SE LE PIANTÓ UN LAGRIMÓN


El viernes por la noche en Villa Ramallo se vivíeron momentos muy emotivos. Es que toda una ciudad estuvo en vilo desde muy temprano, disfrutando de los autos de su más emblemático deportista, Juan María Traverso.


Organizado por el colega Roberto Ghiorzi con la ayuda de la Municiupalidad de Ramallo, se realizó la muestra del Museo itinerante, y además un dignisimo homenaje al hijo pródigo.

En el escenario montado en la Av. San Martín, subieron a saludar al "Flaco", pilotos y ex pilotos que se acercaron para estar cerca del amigo, entre ellos estuvieron Gabriel Raies, Fernando Croceri, "Cachi" Scarazzini, "Lalo" Ramos entre los retirados de la actividad, también dijeron presente Lionel Ugalde y Matías Rossi, Alejandro Urtubey y luego de recibir saludos, distintas plaquetas recordatorias, le hicieron entrega de un cuadro del Torino de su debut, realizado por el artista plástico José María Villafuerte.

La fiesta continuó con la grabación del programa Sigue Girando, que se emitirá el miércoles 2 de noviembre a partir de las 21 hs. por TyC Sports, realizada en el mismísimo escenario con Traverso, Leo Regueira, Marcelo Mercado y el "Pollo" Alvarez.

Todo concluyó con el ídolo subiendo al Torino con el que debutó hace 40 años, llevando de acompañante a su nieta Juana, con quien recorrió algunas cuadras de la Villa y luego subió al podio a festejar con una lluvia de champagne y un hermoso show de fuegos artificiales.

El "Flaco" comentó sobre aquel 31 de octubre de 1971 cuando debutaba con el Torino naranja en Pergamino.

"No hubo ninguna razón que pueda explicar mi gusto por el automovilismo, nadie en mi familia sabía de carreras de autos ni algo que se acercara a la velocidad, sólo los amigos, entre ellos Marito García que ya corría, y nada más.

Cuando comencé a pensar en correr en mi casa se enteraron y mi viejo no quería saber nada, es más le dijo a todos sus amigos que no me vayan a ayudar, pero el viejo Manolo (el papá de Marito García) fue el gran soporte para debutar, ellos me vendieron el auto ya que Marito estaba corriendo en el equipo Chevrolet, y el mismo se encargó de comprar el motor.

En la carrera me pasaron cosas como por ejemplo cuando fui a largar (se largaba de a dos autos cada diez segundos) estaba en la última fila y ya no podía apretar el embrague del susto que tenía, luego ya en carrera comencé a disfrutar de manejar y de la velocidad.

Para esa carrera, el intendente me dijo que pusiera Ramallo en el parabrisas del auto y tenía miedo de que fuera un papelón para el pueblo.

Todo estaba saliendo bien y sobre el final me salí en una curva, y mi padre estaba a pocos metros de allí, entonces sacó una Virgen de Luján, de la cual era devoto, y le pidió que me parara el auto, en esa carrera no le hizo caso, ja, ja".