jueves, 31 de julio de 2014

ONOFRE MARIMON MUERE EN NURBURGRING...

31 de Agosto de 1954 - 60º Aniversario - 31 de Agosto de 2014
Campeones

Hoy se cumplen 60 años de la muerte de una de las grandes promesas del automovilismo argentino, fronteras afuera. Onofre Marimón. El hecho ocurrió durante las pruebas de clasificación del Gran Premio de Alemania de 1954, disputado en el Infierno Verde de Nürburgring. 

Pinocho había nacido en Zárate el 19 de diciembre de 1923 y desde muy chico mamó la pasión por los fierros. Algo que le transmitió su padre, Domingo. Vencedor en la mítica prueba teceísta Buenos Aires-Caracas corrida en 1948. 

El ascenso de Onofre en el automovilismo fue meteórico. Comenzó la actividad corriendo picadas en torno al Valle de Punilla (Córdoba). En 1949 hizo su debut en el TC, pero rápidamente se pasó a los monoplazas de la Mecánica Nacional, donde ganó su primera carrera con el Volpi-Chevrolet que había corrido Juan Manuel Fangio (amigo de su padre), y que preparaba Toto Fangio. 

En 1950, ganó cuatro carreras en la Fuerza Libre y la competencia para no ganadores de TC que organizaba habitualmente el Automóvil Club Mar Del Plata. 

Un año más tarde, Pinocho desembarcó en Europa. Una vez arribado al Viejo Continente se subió a un Talbot, gestionado por Juan Manuel Fangio, para correr en las 24 Horas de Le Mans de 1951 junto a Froilán González. Su presentación fue auspiciosa ya que durante una buena parte de la carrera, el binomio González/Marimón llegó a la segunda posición, luchando cara a cara con los poderosos Jaguars, pero una falla motriz los dejó a pie.

También en 1951 hizo su aparición en la F1. Fue en el Gran Premio de Francia con Maserati, donde debió abandonar con el impulsor herido.

Luego de un 1952 en Argentina, en el que ganó una gran cantidad de carreras dentro de la Mecánica Nacional y conquistó el cariño del público, regresó a Europa en 1953. Y no fue en vano, porque en el Gran Premio de Bélgica, consiguió su primer podio en la F1. Aquel 21 de junio, en el exigente Spa Francorchamps, concluyó tercero por detrás de, Alberto Ascari y Luigi Villoresi.

Con la partida de Fangio a Mercedes Benz en 1954, Marimón quedó como primer piloto y capitán de escuadra en Maserati. 

Pinocho no defraudó. Ésto quedó demostrado en el Gran Premio de Silverstone, cuando tras largar desde la posición 28, remontó 25 escalones y culminó en el tercer lugar, protagonizando la escalada más importante que se haya visto jamás en la máxima categoría. 

Lamentablemente ese fue su último podio. Luego del paso de la Fórmula 1 por Inglaterra, llegaba el Gran Premio de Alemania. En el equipo Maserati las cosas no estaban de la mejor manera, debido a que Stirling Moss, quería la posición de Marimón dentro del conjunto. En ese ámbito comenzaron las pruebas de clasificación en Nürburgring y el argentino salió con vehemencia a buscar el tiempo pese a los consejos de Fangio, pero en la bajada de Adenau, siguió de largo y de esa forma se apagó la vida un día como hoy de 1954, de quien para muchos era el sucesor del Chueco.

La noticia caló hondo tanto en Fangio como en Froilán Gónzález, que al día siguiente abandonó transcurridas dos vueltas de carrera producto de  la congoja. El balcarceño, herido y todo siguió hasta la conseguir la victoria en nombre de quien 24  horas atrás se había convertido en el primer piloto que dejaba la vida en un Gran Premio de Fórmula 1.