En la jornada del viernes, en los boxes del Roberto Mouras se hablaba casi tanto del inicio de la actividad de la 13ª fecha del 73º Campeonato Argentino del Turismo Carretera como de la inauguración del Museo Mouras, ése que tanto soñó Hugo Mazzacane y que finalmente se hizo realidad.
“Agradezco a cada una de las personas que me ayudaron a hacer posible esto. A los pilotos que me cedieron sus autos y a los que colaboraron para que se recuperaran otros. Hay algo que quiero dejar en claro, este no es el Museo del Mouras, es el Museo del Turismo Carretera y está para que todos lo que quieran puedan venir a recordar parte de la historia de la categoría”, afirmó el presidente de la ACTC, responsable del autódromo platense y artífice del museo, el cual estará abierto cada fin de semana que haya carreras.
El sábado Gastón Mazzacane condujo el Trueno Naranja con el que Carlos Pairetti logró el título en 1968. El domingo, 39 autos deleitaron al público que, en muchos casos, revivieron una imagen de muchos años atrás. De ellos, 20 fueron campeones del TC. Además, hay otros cinco coches que están siendo preparados, entre ellos uno de la Fórmula 1.
Junto a Roberto Mouras y a Juan María Traverso, con tres coches Oscar Castellano es quien más vehículos de antaño aportó. “¿En dónde los consiguió mis ex autos? No lo sé, Hugo tiene un imán para encontrarlos”, contó el Pincho, quien como la gran mayoría de los que se reencontraron con los vehículos que vivieron momentos de gloria en la categoría mostró una gran emoción y gratitud.
Sin dudas, este tipo de emprendimientos son una fuente de inspiración para los que no vivieron la época de oro del TC, esa que le dio el mote de ser la categoría más popular de la Argentina y por la que muchos abuelos le transmitieron a sus nietos la pasión por el TC. En buena hora.
