El actual campeón de la Fórmula 1, Sebastian Vettel,
decidió no participar de la clasificación del sábado en Austin con el
objetivo de ahorrar neumáticos y kilometraje, ya que tendrá que salir
desde el boxes obligatoriamente por cambiar su unidad de potencia al
completo. Sin embargo, esta actitud poco gustó a la organización del
Gran Premio de EEUU, que clasificaron de bastante "desafortunada".
El
alemán, que ya había declarado que "es una situación totalmente
estúpida", decidió manifestarse de esta manera. "Los aficionados
encenderán la televisión y verán a un piloto que anda por ahí y no tiene
nada que hacer", advirtió Sebastián.
Recuperados
por la pérdida de Caterham y Marussia en la grilla para el Gran Premio
de EEUU, el cofundador del circuito de Austin, Bobby Epstein, manifestó
su malestar ya que además, uno de los autos más importantes de la F1,
como es el RB10 del alemán, no participará en la clasificación del
sábado.
"Es un lastima. Me gustaría que Vettel
comenzara la carrera desde la parrilla. No afectará a la venta de
entradas, porque la mayoría de las personas que se acercan al circuito
lo hacen por vivir la experiencia, pero es una situación desafortunada",
comentó Epstein al periódico británico The Guardian.
La
F1 atraviesa una etapa que preocupa a todos. A la pérdida de las
escuderías Marussia y Caterham, podrían sumarse otros equipos que luchan
por sobrevivir al Gran Circo. Epstein opina que la categoría debería
aprender de la competición más seguida por los estadounidenses, la
Nascar. "La F1 tiene que personalizarse, esto la Nascar lo hace muy
bien. La gente tiene que conectar con los demás, no tienen que conectar
con el metal", concluyó.