
"Los motores son un gran desafío para los fabricantes. Tengo muchas ganas de ver en acción los motores para ver como son de complicados e ingeniosos. Van a ser unidades de potencia extremadamente tecnológicas, eso seguro. Y en lo referente al sonido, la gente se acostumbrará muy rápido. Honestamente, cuando pienso en los antiguos motores BMW de cuatro cilindros que pilotamos en los días Brabham, subían hasta las 11.000 rpm y sonaba bien. Los nuevos motores no van a ser silenciosos, el sonido será diferente pero la gente creo que se acostumbrará rápido", indicó Whiting.