El siete veces campeón del mundo, Michael Schumacher, no lamenta su regreso a la Fórmula 1 pese a que éste no haya sido tan exitoso como se esperaba. "Nunca me he arrepentido de regresar. Aún siento la pasión por la competición, por las carreras, por luchar, aún lo llevo dentro. Además, en mi caso, los momentos difíciles se transforman en un estímulo extra", explicó el Kaiser en una entrevista concedida al diario El País de España.
Schumacher reconoció que el año pasado le costó adaptarse a los neumáticos Bridgestone y que, esta temporada, tras probar los Pirelli sintió que "todo volvía a su sitio". Pese a ello, en cualquier caso, sus resultados tampoco están siendo como para tirar cohetes en la presente temporada y el alemán marcha undécimo, con seis puntos.
Unos resultados que no se asemejan a los que logró en el pasado y que Schumacher no atribuye a su edad, 42 años. "Cualquier actividad que hago sobre cuatro ruedas me indica que sigo siendo competitivo, siempre voy delante. La mejor manera de definirlo es la siguiente: el éxito que tuve en el pasado se debió, seguramente, a que era una persona excepcional. Probablemente sigo siéndolo si tenemos en cuenta lo que estoy haciendo ahora, con 42 años. Por eso estoy contento y orgulloso de haber vuelto. No creo que muchos puedan hacerlo después de tres años sin correr", aseguró.
Schumacher, además, aún sueña con ganar el campeonato ("ése es el objetivo, no hay otro", señaló) y cree que por "calidad" está al nivel de Lewis Hamilton o Sebastian Vettel.
Sobre los que le critican, Schumacher sentencia: "¿Cómo pueden juzgar si ya no corren? ¿Quiénes son ellos para valorar eso si la mayoría se dedica a comentar las carreras por televisión? ¿Cuántos detalles tienen sobre lo que pasa realmente?".
