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Wolfgang Ullrich el gran jefe de Audi se jugó mucho en la edición 2010 de las 24 horas de Le Mas. Si todo salía bien, como al final ocurrió con el triplete de los Audi, que culminaban su décima victoria en once años (una bajo los colores de Bentley), se daría luz verde al desembarco de la marca en la Fórmula 1.
Wolfgang Ullrich el gran jefe de Audi se jugó mucho en la edición 2010 de las 24 horas de Le Mas. Si todo salía bien, como al final ocurrió con el triplete de los Audi, que culminaban su décima victoria en once años (una bajo los colores de Bentley), se daría luz verde al desembarco de la marca en la Fórmula 1.
Pero en ese momento los Peugeot dominaban la situación, aunque al final los problemas en sus autos los dejaron fuera de pista.
Es comprensible la explosión de alegría del propio Ullrich al ver entrar sus R15 copando el podio de la que probablemente es la carrera más importante del mundo. Los tres pilotos ganadores fueron los del auto 9: los alemanes Timo Bernhard y Mike Rockenfeller y el francés Romain Dumas.
Así las cosas, parece que a partir de ahora se abren las puertas de la Fórmula 1, no se sabe si entrando directamente o aprovechando el puente que les podría brindar el equipo Hispania, cuyo responsable deportivo, Colin Kolles, es el propietario de la formación satélite de Audi en Le Mans. Es decir, todas las piezas encajan. Sólo falta por ver si se producirá el próximo año o esperaran, pero todo indica que la decisión y el anuncio son inminentes.
