..:: Largaron ::..
La lluvia no sólo no fue un impedimento para que
los aficionados se acercaran al microcentro de la Ciudad de Buenos
Aires, sino todo lo contrario, le puso esa cuota de humedad al piso para
que los autos derraparan más espectacularmente. No tanto el DS3 de WRC,
que puede hacerlo sin ayuda del piso, pero sí en el caso del C-Elysée
de WTCC y el C4 de Turismo Nacional.
Los pilotos convocados por Citroen Argentina para este Road Show 2015
fueron sus dos campeones del mundo, Sebastien Loeb y José María López, y
el campeón argentino de TN Clase 3, Matías Rossi.
Pocos minutos después de las 13:30, Matías Rossi fue el primero en
romper el silencio sobre Diagonal Norte, entre Maipú y Suipacha con el
estruendoso sonido de su Turismo Nacional. Después salió "Pechito" con
el muletto de WTCC, poniéndolo al corte al salir acelerando y patinando
desde las carpas que hacían las veces de boxes de los tres autos.
Después salió el DS3, el auto de WRC que todos querían ver, y todos
imaginamos que quién lo conducía era Sebastien Loeb, sin embargo,
después de probar la rampa para saltar que estaba en el medio de los 300
m de recta destinados al evento, quién emergió del auto fue López para
sorpresa de todos.
"Como Seb no había llegado y había que probar cómo había quedado la
rampa, me subí yo. Es un auto muy divertido de manejar, para este tipo
de evento me quedo toda la vida con el auto de rally antes que con el
mío", le dijo el cordobés a Largaron.com.
Justo cuando López bajaba del DS3, llegaba directo desde Ezeiza el
multicampeón francés, con su valija y todo caminando por las calles
porteñas. Se saludaron entre sí, y empezaron las sesiones de fotos con
Matías Rossi y con los tres autos de carrera.
Después un desfile de autos de la marca de todos los tiempos, y
finalmente el Road Show propiamente dicho. Rossi primero, López después,
Loeb en tercer orden. Antes de empezar a divertirse entre ellos,
llevaron a girar a distintos invitados especiales de Citroen y Total
como jugadores de Boca Juniors y actores identificados con Citroen.
Entonces después fue el turno de Loeb de llevar de acompañante a
Pechito y más tarde a Rossi. Un cierre perfecto, para una tarde sin
carreras en Argentina.