La desaparición de Marussia fue bastante negativa para
Ferrari y McLaren. Al parecer, según reveló ayer el diario británico The
Telegraph, ambas formaciones dejarán de ingresar una considerable
cantidad de dinero por la quiebra de la estructura rusa.
Al
parecer, a la Scuderia se le debían más de 20 millones de euros por el
suministro de las unidades de potencia, mientras que a los de Woking
quedaba pendiente el pago de 9 millones por los servicios prestados en
términos de asesoramiento técnico. Debido a la bancarrota de la
formación antes denominada como Virgin, los dos equipos más antiguos no
podrán ingresar estas cantidades.
Además, el
mismo rotativo apuntó que Lloyds Development Capital (LDC), la división
de capital privado de Lloyds Banking Group, recibió los casi 17 millones
de euros que el equipo fundado en 2010 tenía que abonarles, por medio
de todos los activos de la estructura. Los otros 200 acreedores a los
que la formación debía dinero aún no han recibido parte alguna de la
deuda que existía.
Geoff Rowley, socio fundador
de la asesoría financiera británica FRP, explicó que este pago contaba
con prioridad sobre el resto. El problema es que no existen recursos
suficientes para saldar las cuentas pendientes con las otras partes.
"Los
acreedores con garantías sufrirán un déficit significativo. Hay
propiedades insuficientes para permitir que se efectúe una distribución a
los acreedores sin garantías", sentenció.