El espectáculo de la segunda serie estuvo en la punta
gracias al duelo que mantuvieron Mariano Werner y Matías Rossi
intercambiando posiciones y ofreciendo una lucha franca entre Ford y
Chevrolet en Toay.
El entrerriano largó desde la
segunda posición pero enseguida lo buscó por el sector externo de la
primera curva. Tomó la punta y el Misil recupero la posición pero fue en
la segunda vuelta cuando Werner volvió a ejecutar la misma maniobra
para tomar la posición de privilegio.
Se
intercambiaron los puestos constantemente hasta que, sobre el final, una
maniobra más que ajustada amenazo la victoria que buscaba Werner. Y es
que Rossi lo obligó a transitar por el sector externo y pisar los
reductores pero luego desacelero, entendiendo que se había equivocado.
"Estoy
muy contento. Va para toda la gente de Ford porque lo pudimos pasar al
Chevrolet. Fue una gran serie, peleada, al límite. Le gane la pulseada y
ahora a pensar en la final porque, por suerte, pudimos ser mas rápida
que la primera", comentó el entrerriano y agregó: "Pensaba que la perdía
porque cuando fuimos afuera, a la pintura, el auto se quedo sin grip,
pasamos por los reductores y es difícil volver".
Luego
de arribar segundo, Rossi comentó: "Felicitar a Mariano que fue un
justo ganador y gano una carrera muy linda. No hubo especulación, la
pista estaba muy complicada. Asumió riesgos mayores que yo, quise
minimizar riesgos en ese sector y seguir adelante".
En
cuanto a la última maniobra, al límite, Rossi admitió que se equivoco y
declaro: "Trato de hacer una maniobra mi auto llega hasta la línea roja
y ahí lo llevo a Mariano y levanto porque no quería un recargo porque
entendía que la posición estaba mal ganada".
La
diferencia que tenia Juan Marcos Angelini en la tercera colocación no le
permitió sacar provecho de esa complicación de los punteros. Sin
embargo, se mantuvo tercero con la Dodge del UR Racing, delante
Guillermo Ortelli y de Agustín Canapino.