La crisis económica mundial se hace sentir en todos los
sectores y la Fórmula 1 no es la excepción. A la anunciada ausencia de
Caterhamn en el Gran Premio de Estados Unidos, se le suma ahora
Marussia.
El equipo ruso-británico se declaró
insolvente y, más allá de su ausencia en Austin, no está claro si estará
en los Grandes Premios de Brasil y Abu Dabi, que cierran la temporada.
Así, el Gran Premio de Estados Unidos se correrá con sólo 18 pilotos, la
cantidad más reducida desde Mónaco en 2005.
Noveno
en el campeonato mundial, Marussia no logró atraer dinero fresco para
garantizar la sustentabilidad a largo plazo del equipo. Los propietarios
administrativos entran en concurso de acreedores y casi 200
trabajadores podrían perder su trabajo ante la quiebra del equipo.
Marussia
es además el equipo en el que corrió esta temporada el francés Jules
Bianchi, gravemente accidentado en el reciente Gran Premio de Japón.