Si bien es sabido que McLaren es una de las opciones más firmes para el futuro de Fernando Alonso, fue el propio equipo el que salió a confirmar que mantienen conversaciones de cara a la próxima temporada.
El
plan del español parece ser aceptar un solo año de contrato y recalar
luego en Mercedes. De todas formas, los acontecimientos podrían
precipitarse en las últimas citas de la temporada, porque en Mercedes no
están contentos con Lewis Hamilton. No hay nada que reprocharle en lo deportivo, salvo que en ocasiones, no respondió a las indicaciones técnicas.
El
problema de Lewis es su imagen y la que reporta a la marca, como al
airear en público las conversaciones internas del equipo, cosa que
sucedió en Spa, tras el incidente con Rosberg que le costó el abandono.
También
su petición de aumento de sueldo para renovar a partir de 2015, con
unas pretensiones que parecen inaceptables para el equipo de la
estrella.
Pero hay
otro problema, que los sindicatos de trabajadores de la marca en sus
diferentes plantas de todo el mundo, ya traspasaron sus quejas a la
marca en las negociaciones colectivas. No entienden que les quieran
congelar los salarios, cuando hay un empleado que se compra aviones de
23 millones de euros. La ostentación no es una cualidad saludable en los
tiempos que corren.
Lo
que corre ahora es el rumor de que Mercedes ya le comunicó a Hamilton
que no será renovado a partir de 2016, con lo que Fernando vería abierta
la puerta a la que tampoco renunció por el momento. Pero también es
cierto que, a esta hora, la opción de McLaren es la que mejor encaja en
el futuro inmediato del asturiano. Salvo un cataclismo de última hora en
el seno de Mercedes, es el único lugar libre en uno de los llamados
grandes de la F1.
Por
el momento, Eric Boullier, director deportivo del equipo de Woking, no
tuvo problema alguno en reconocerlo. "Estamos hablando con Fernando, por
supuesto", declaró una hora antes de la carrera de Suzuka en Movistar
TV. "Creo que en dos semanas, más o menos, podremos anunciar nuestra
formación para el próximo año, aunque tampoco es nuestra principal
prioridad en este momento", agregó el francés.
No
parece probable que McLaren, y sobre todo Honda, que es quien paga la
fiesta a partir de 2015, llegue aceptar un solo año de contrato para el
asturiano. No hay continuidad y es un síntoma de desconfianza desde el
principio.