Veinte años después de que Ayrton Senna muriera en la pista de la carrera del Gran Premio de San Marino en Imola, la ciudad se está preparando para honrar al piloto de Fórmula 1 que se le recuerda tanto por su caridad y su carisma como por sus tres campeonatos del Mundo.
El astro brasileño sigue estando en la memoria de muchos de la ciudad del norte de Italia en la que cinco días de eventos conmemorarán el aniversario del fallecimiento de Senna que comienzan el 30 de abril.
Aquel fin de semana de 1994, la muerte de Senna, el último piloto fallecido durante una carrera de Fórmula 1, y la muerte del austríaco Roland Ratzenberger el día anterior, fueron un punto de inflexión en el mundo de las carreras de motor provocando cambios radicales en las normas de seguridad.
Los organizadores esperan que los eventos del aniversario lleven gente de nuevo al circuito de Imola que desapareció del calendario de Fórmula 1 en 2006, pero que todavía alberga el campeonato del mundo de Superbike.
Banderas de Escocia y Brasil quedaron en la reja que hay en el lugar del accidente de Senna son testimonio de las personas que vienen de todas partes del mundo para rendir homenaje a su héroe, pero los días en que millares de aficionados invadían el circuito se han ido.
