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El campeón de Fórmula 1, Sebastian Vettel, se disculpó en persona ante
los empleados de Red Bull por ignorar las órdenes de equipo en el
controvertido Gran Premio de Malasia.
El equipo dijo que el piloto alemán de 25 años habló también con su
agraviado compañero Mark Webber, al que le arrebató la victoria de las
manos en las últimas vueltas, después de la carrera en Sepang y que
ambos se dieron la mano.
"Dijo que no puede dar marcha atrás el tiempo, pero aceptó que lo que
hizo está mal", dijo el director del equipo, Christian Horner, sobre
Vettel, que visitó el martes la fábrica de Milton Keynes para hablar con
los trabajadores de la escudería.
"Pidió disculpas al equipo y a cada miembro del personal porque admite
que el equipo es vitalmente importante y ser parte del equipo es un
aspecto crucial para poder competir en estos campeonatos".
Vettel también se disculpó ante Webber en la rueda de prensa tras la carrera del domingo, afirmando que cometió un error.
"La intención del equipo era que Mark ganara esa carrera", declaró
Horner en Sky televisión el jueves, cerrando cualquier especulación
sobre el futuro del australiano.
"Tiene un coche que es capaz de ganar carreras y ojalá aspirar al
campeonato, así que no dudo de que Mark terminará la temporada con
nosotros".
Horner admitió que los aficionados quieren que los pilotos compitan
entre sí, pero dijo que su responsabilidad es ante 600 empleados del
equipo y cuyas primas se determinan según la posición en el campeonato
de constructores.